“La nueva normalidad”, lo oigo todo el día.
Estos últimos seis meses no han sido lo que consideraríamos “normal”. ¿Qué significa esa palabra?
Según el diccionario, “normal” es “conforme a la norma o al tipo común; usual; no anormal; regular; natural”. Supongo que se puede decir que lo que teníamos era normal, pero no estoy convencida de que lo fuera, ni siquiera antes de la COVID-19.
De todas formas, los últimos seis meses han sido muy duros. La COVID-19 es un tema totalmente aparte, pero, por ahora, hablemos de los efectos colaterales que ha traído a la sociedad; en particular, centrémonos en la continuidad del negocio.
Trabajar desde casa ha sido uno de los ajustes más significativos. Sin embargo, seamos realistas: sin todo tipo de comercio funcionando, nuestra economía sufre. Aunque el mundo esté pidiendo ayuda a gritos, “el espectáculo”, también conocido como negocio, debe continuar.
Los empleados necesitan sus trabajos para cuidar de sus familias; los empleadores necesitan sus negocios para ganar dinero; los clientes necesitan sus servicios o proyectos para entregar a sus accionistas, y así sucesivamente. Si las empresas no se adaptan, este ciclo de interdependencia no sobrevivirá.
Ahí es donde entra en juego la continuidad de los negocios. Es decir, comprender las posibles amenazas a las que se enfrenta una empresa y crear sistemas para prevenirlas, afrontarlas y recuperarse de ellas.
Como empresa, hemos tomado todas las medidas para asegurarnos de que todos nos mantengamos seguros y productivos. Hemos hecho la transición a nuestro Optime Virtual Space, en el que hemos tenido un gran éxito. Estamos continuamente entregando resultados y creciendo. De hecho, seguimos sumando nuevos miembros a nuestro equipo. En una pandemia, eso es anormal.
Nuestro equipo ha creado una nueva solución para eventos virtuales llamada eBrightConnect. Hemos crecido nuestra línea de videos interactivos como nunca antes con Video2Market. Somos consultores, y al igual que consultamos a otros, nos aseguramos de siempre adaptarnos a lo que nuestra compañía y clientes necesitan.
La COVID-19 puede ser ahora la “nueva normalidad”, pero también lo son nuestras soluciones. Hacemos que funcione, nos adaptamos y seguimos adelante.
Todos necesitamos adaptarnos. Necesitamos pensar fuera del esquema. Necesitamos crecer, comunicarnos, aprender, desarrollarnos y continuar con la nueva normalidad. Si no lo hacemos, nuestras empresas no estarán preparadas.
Es hora de desarrollar y hacer que esas ideas cobren vida. Recuerda, la nueva normalidad significa adaptarse, y no estás solo.
SIgue pendiente para ver más de nuestras publicaciones en el blog “Trabajar desde casa, la serie”.
Tendencias – ADAPTARSE A NUEVA NORMALIDAD – TRABAJAR DESDE CASA, LA SERIE
By: Isabela Rosa – Septiembre 2020
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